Uno de los recomendantes de Jairo dijo que «Jairo ha sido un vegetariano en una comunidad donde el vegetarianismo es infrecuente y no es fácil. A lo largo de su carrera estudiantil, ha concurrido a varias protestas de PETA (Personas a favor del Trato Ético de los Animales) y se ha ofrecido como voluntario con Mercy for Animals (Compasión para los Animales). Nunca he conocido a un estudiante de escuela secundaria superior tan dedicado a los derechos de otros (humanos y no humanos)». Otros recomendantes informaron: «Jairo es la persona más al tanto sobre el medio ambiente y consciente sobre los animales que conozco». «Él ha sido un miembro activo de buildOn Leadership Team (Equipo de liderazgo constructivo), también conocido como b.L.T. Sus pares en broma lo llamaron el club del beicon, la lechuga y el tomate, pero Jairo se negó e insistió en que su apodo oficial fuera el club del brócoli, la lechuga y el tomate. Para sorpresa mía, el grupo entero votó a su favor».
Jairo escribió: «Vivo en una comunidad con base mexicana y latina. A algunos les parece sorprendente porque la cultura mexicana está llena de especias y carne… operé un club extra-escolar llamado Students for the Ethical Treatment of Animals (Estudiantes a favor del Trato Ético de los Animales) en mi primer año. Nos aseguramos de ser reconocidos en la escuela al solicitar una hamburguesa vegetariana par nuestro menú del almuerzo. Hablamos con el personal del almuerzo hasta que conseguimos que la implementaran. También he sido una parte importante en el huerto comunitario de mi escuela». Jairo ayudó con la instalación del huerto y se volvió el presidente estudiantil del Garden Team (Equipo del Huerto). Afirmó: «Enseño a la gente cuán fácil es conseguir un tentempié y una comida decentes del huerto. Mi mayor éxito es mi delicioso cebiche, en comparación con su contraparte. A todos les encanta y les sorprende que sea vegano».
Jairo dice que ha asistido a varias protestas y liderado protestas con orgullo él mismo con estudiantes de su club de derechos animales. Al principio, «Nadie creía que yo fuera un activista porque era un chico tranquilo en la escuela».
«Me decidí por graduarme en gerencia comercial… con una licenciatura en comercio. Conoceré con detalle cómo tener un negocio y abriré mi propio restaurante vegano. Se llamará El Vegan. Solo con esto, mostraré la comida apetecible que se ofrece y por tanto contribuiré a mi comunidad, con una perspectiva más saludable».
Jairo dice que no quiere ser menospreciado como una minoría «indefensa». «Soy latino, soy vegetariano. Soy un luchador, y soy un triunfador. Me pongo objetivos y con mi compromiso y determinación, hago tanto como sea posible por conseguirlos. Me encanta el trabajo comunal. Me gusta saber que participo en la estructura de mi comunidad. Cuantas más personas vean cómo nos podemos ayudar entre nosotros, menos violentas serán nuestras calles. El camino a la igualdad y la paz es mediante el servicio y el entendimiento».